LLega la hora del patio,
se empieza a notar un murmullo,
todas las clases van saliendo,
desde los más grandes a los más pequeños
La alegría es visible entre los rostros,
cada uno va llegando a su destino,
en pocos segundos el patio queda inundado,
de alumnos que se divierten y descansan de la dura rutina,
El tiempo va pasando,
y suena el temido timbre,todos hacia las clases,
tienes la sencación de ser un niño al cual le dan un caramelo y luego se lo quitan,
para ti el patio ha trancurrido en tres segundos,
no tienes ganas de voler a la clase.
Toca la parte negativa de ser alumno, trabajar y estudiar,
pero es lo necesario para el futuro,
un día a día muy duro.